Muy pronto iban terminando los días del trabajo en común, de la convivencia alegre y orante en unidad y diversidad.

Se dan los últimos toques a las formulaciones de los textos que todavía serán aprobados por votación en el Capítulo.

En el momento oportuno, se les comunicará a todas las hermanas lo que el Capítulo General ha discernido, formulado y decidido para la vida de toda la Congregación en los próximos años; se lo hizo en el trabajo grupal en diversas formas, a través de intercambios personales, discusiones plenarias y oraciones comunitarias y personales.

La publicación no será posible tan rápidamente, porque es necesario dar los últimos retoques en los idiomas de los respectivos países.

Los resultados de las sesiones electorales fueron transmitidos inmediatamente a todas las comunidades por los equipos directivos provinciales y de las delegaciones.

Queremos también agradecer a nuestra moderadora externa, Hna. Ingrid, por su gestión competente y eficiente del trabajo. Para nuestro deleite, tampoco en los momentos de cansancio nunca faltaba el humor y la serenidad.

El día sábado, 18 de agosto, el Capítulo General 2018 se cierra oficial- y solemnemente, asimismo como se lo había abierto.

Celebramos la alabanza matutina y la Santa Misa en acción de gracias en la Capilla de la Resurrección, con canciones y música en todos los idiomas, como siempre en estos días.

Es en la sala capitular donde siguen los agradecimientos y las palabras finales de nuestra Superiora General Hna. Monika Heuser, así como el envío de las capitulares. La mayoría de ellas volverá a los lugares de su comunidad y su misión, los que son tan variados como era todo el Capítulo.

Todos hemos comprendido más profundamente lo que significa el tema del Capítulo en sus diversas dimensiones: ¡Confiando en Dios atrevernos, cada vez más vivir como Hermanas del Divino Redentor!

Como conclusión, todos se reúnen en el oratorio "Madre Alfons Maria" delante del relicario de nuestra fundadora para un tiempo de oración en común.

La despedida es animada, cálida, a menudo conmovedora o marcada por acentos personales. Las valijas están hechas, guardadas: autos, minibuses salen de la Casa Madre General, dentro y fuera se ven hermanas que saludan haciendo señas.

Casi todas las hermanas de los países del sur se quedan aquí hasta el gran día, el 9 de septiembre, cuando muchas Hermanas europeas regresarán a Alsacia para estar presente con ocasión de la Beatificación de nuestra Fundadora Madre Alfons Maria en la Catedral de Estrasburgo. Lo que ella puede significar para nosotras, eso fue uno de los temas que compartimos en el Capítulo General.

¡Den gracias al Señor, alaben Su nombre!